Viernes feliz

Publicado el 09 May 2025

Por fin había terminado el último día de trabajo. Aunque fue una semana corta, la sensación de saber que el fin de semana está por comenzar trae una alegría y satisfacción difíciles de explicar.

Salí un poco tarde, necesitaba ordenar mi lugar antes de marcharme, así que me tomé las cosas con calma.
Me dirigí al estacionamiento; esta vez, la bicicleta estaba en perfecto estado, lista para el recorrido.
La tarde era algo calurosa, pero he pedaleado bajo peores condiciones, así que decidí simplemente disfrutar el camino.

Ya no quedaban autobuses de Samsung recogiendo personal, lo cual hizo que los primeros kilómetros fueran tranquilos.
Solo hubo un incidente con un tráiler que no me visualizó al incorporarse en una intersección; yo seguía mi trayecto y él tuvo que frenar ligeramente para dejarme pasar.

Fuera de eso, el recorrido fue relajado. Hice pausas prudentes en las zonas donde se incorporan los autos.
Esta vez decidí tomar el camellón desde el semáforo del Refugio, evitando así el tramo conflictivo del camino lento.
Funcionó a la perfección: no tuve que lidiar con los taxis, que suelen hacer muchas paradas y cortan el flujo del recorrido.

Al llegar a la gasolinera, un oficial estaba dirigiendo el tráfico para evitar el embotellamiento en el gas Silza.
Estuve detenido algunos minutos hasta que me dio el pase. Me incorporé nuevamente al camino lento y avancé sin pausas hasta llegar a la gasolinera de la Ley Express.
Aproveché para comprar unos tacos. Es viernes, así que hay permiso para relajarse un poco.

Y así fue como llegué feliz a casa. Charly me recibió con entusiasmo, y mi esposa también. Todo estaba en paz.

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